Legalización del Cannabis en Uruguay: Un Balance de Resultados y Desafíos

En los parques, estadios o playas de Uruguay, el olor del humo de marihuana se ha diversificado considerablemente desde que el país legalizó el cannabis recreativo, siendo pionero en todo el mundo. La decisión de regular la producción, venta y consumo de esta sustancia fue aprobada por el Parlamento uruguayo el 10 de diciembre de 2013, y hoy, diez años después, se pueden observar diferentes impactos de este cambio que captó la atención internacional.

La regulación de la marihuana en Uruguay no se implementó de manera inmediata. En 2014 se inició el registro de cultivadores domésticos y clubes de membresía, permitiendo que grupos de entre 15 y 45 personas pudieran producir hasta 480 gramos anuales por hogar o socio, respectivamente. Sin embargo, fue recién en 2017 cuando comenzó la venta de marihuana en farmacias, marcando un punto clave en la implementación de esta ley.

El Mercado Legal del Cannabis: Un Éxito Relativo

Uno de los principales logros de la regulación del cannabis ha sido la creación de un mercado legal que no existía antes. Rosario Queirolo, politóloga y profesora de la Universidad Católica del Uruguay, ha destacado que este mercado tiene ventajas importantes, como permitir que los usuarios de marihuana se alejen de los circuitos ilícitos, a menudo vinculados al crimen organizado, y accedan a productos con mayores controles de calidad en farmacias. Esta transformación ha sido significativa para muchos consumidores, ya que les permite obtener cannabis de manera segura y confiable.

Sin embargo, la ambición inicial del gobierno uruguayo, encabezado por el entonces presidente José Mujica, de disputar el negocio de la marihuana a los narcotraficantes y mejorar la seguridad pública, no se ha materializado por completo. Según Queirolo, “ese mecanismo causal no funciona”. A pesar de la regulación, los índices de homicidios y robos continúan en aumento, lo que evidencia que la legalización del cannabis no ha sido la solución definitiva a los problemas de seguridad.

Diez Años de Legalización en Cifras

Diez números ayudan a entender los primeros diez años de legalización del cannabis en Uruguay:

  • 86,207 usuarios registrados: Según el Instituto de Regulación y Control del Cannabis (IRCCA), hasta junio de 2023, un total de 86,207 uruguayos están registrados como usuarios de cannabis, lo que equivale aproximadamente al 2,5% de la población total del país.
  • 66% de consumidores no registrados: A pesar de la existencia del mercado legal, dos de cada tres consumidores de marihuana en Uruguay no están registrados y siguen recurriendo al mercado negro o gris. Entre las razones de esta preferencia están el temor a la divulgación de datos personales y el rechazo a la intervención estatal.
  • 19% de uruguayos consumen cannabis regularmente: Un estudio realizado en mayo de 2022 por la encuestadora Cifra reveló que el 19% de los uruguayos mayores de 16 años ha vuelto a consumir marihuana tras haberla probado anteriormente. Esta cifra ha aumentado respecto al 10% registrado en 2016, aunque se cree que parte de este incremento se debe a una mayor disposición de los uruguayos a admitir su consumo de cannabis debido a la normalización de su uso.
  • 7 de cada 10 usuarios compran en farmacias: La mayoría de los consumidores registrados (70%) adquiere su cannabis en farmacias, mientras que el 17% opta por cultivarlo en sus hogares y el 12% lo obtiene a través de clubes de membresía.
  • 10,5 toneladas vendidas en farmacias: Desde el inicio de la venta de cannabis en farmacias en julio de 2017 hasta junio de 2023, se han vendido un total de 10,5 toneladas de marihuana a través de 2,1 millones de transacciones, lo que equivale al consumo anual de una ciudad como Filadelfia en Estados Unidos.
  • 15% de THC: El cannabis disponible en farmacias uruguayas tiene un contenido máximo de THC (tetrahidrocannabinol) del 15%. Esta variedad, conocida como “gamma”, es un híbrido con predominancia índica que se ha convertido en la favorita de los usuarios debido a su mayor psicoactividad en comparación con las otras dos variedades disponibles.
  • 460 pesos uruguayos (unos US$12) por cinco gramos: El precio del cannabis en farmacias es significativamente más bajo que el de otros mercados, tanto legales como ilegales, en diferentes partes del mundo. Por ejemplo, en Montreal, Canadá, el gramo más barato de cannabis cuesta US$5,9, mientras que en Tokio, Japón, puede alcanzar los US$33,8.
  • 5,3 millones de dólares en ventas al exterior: En 2022, las empresas uruguayas habilitadas para la exportación de cannabis generaron ventas por valor de 5,3 millones de dólares, principalmente con fines medicinales. Los principales mercados de exportación fueron Portugal, Alemania, Israel y Canadá.
  • 13 licencias activas para el cultivo medicinal: Actualmente, hay 13 licencias activas otorgadas a empresas en Uruguay para el cultivo de cannabis con fines medicinales. Además, hay varios proyectos de investigación en marcha, abarcando desde el desarrollo farmacéutico basado en cannabidiol (CBD) hasta el uso de esta sustancia en terapias ansiolíticas y dermatológicas para perros.
  • 48% de apoyo a la ley: A medida que la legalización del cannabis ha avanzado en Uruguay, el apoyo público a la ley ha aumentado. Según una encuesta de Cifra realizada en 2022, el 48% de los uruguayos está de acuerdo con la regulación del mercado de marihuana, duplicando el 24% que apoyaba la ley en 2012. Sin embargo, un 45% sigue estando en desacuerdo con la medida.

Desafíos y Perspectivas Futuras

A pesar de los logros, aún persisten desafíos importantes. Uno de los principales es la reducción del mercado ilegal, que sigue siendo dominante en gran parte del país. Queirolo sugiere que, para avanzar en este aspecto, es necesario realizar cambios en la política actual, con el objetivo de aumentar el tamaño del mercado legal y reducir la dependencia de los consumidores del mercado negro.

Además, aunque el sector del cannabis ha generado empleos y exportaciones, los resultados económicos aún son limitados en comparación con otros sectores del país. Varias empresas que apostaron por la industria del cannabis han enfrentado dificultades financieras, lo que pone de manifiesto la necesidad de continuar fomentando el crecimiento y la estabilidad del sector.

Conclusión

A diez años de la legalización del cannabis en Uruguay, el país ha logrado avances importantes en la creación de un mercado legal que ofrece a los usuarios un acceso seguro y controlado a la marihuana. Sin embargo, también ha quedado claro que la legalización no ha resuelto todos los problemas asociados con el consumo de drogas, como la seguridad pública y el mercado ilegal. A medida que Uruguay sigue perfeccionando su política de cannabis, el futuro de esta industria sigue siendo incierto, pero promete continuar generando debates y lecciones valiosas para otros países que están considerando seguir el mismo camino.